Me detengo unos momentos a reflexionar,
en el plano personal, qué me traerá en las próximas semanas, meses, años, la aplicación
y puesta en marcha de la Ley 20/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentespara la reducción de la temporalidad en el empleo público.
Como para el tratamiento jurídico
y a “descifrar” la norma es seguro que vamos a dedicar bastante tiempo, no está
de más que también nos ocupemos de ver el asunto con cierta perspectiva; y no me refiero solo a quienes podemos ser
partes interesadas-afectadas, sino también a quienes deben velar por el
cumplimiento de la norma, es decir Directores/as y quienes gestionan Personas o, como todavía seguimos diciendo, Recursos Humanos , así como organizaciones
sindicales.
Pensemos en que cada uno cumple su función y que ninguna de ellas es fácil aunque pueda parecer lo contrario.
Llevo insistiendo, desde hace tiempo, en la idea de que deberíamos
haber sido capaces de saber cuál es el interés general que ha de primar para la
Administración Pública y para la sociedad en su conjunto, a la hora de redactar
una norma que trate de poner orden en el tema de la temporalidad en el sector
público, pero ¡vaya, que no hay forma!
Estoy casi convencida de que a
partir de ahora empezaremos a ver posturas hacia uno y otro lado porque tenemos
mucho margen para ello, demasiado.
Solo espero que queden algo claros los criterios que han de ser aplicados y
se pueda predicar cierta homogeneidad en la convocatoria de los procesos de
estabilización.
Ojalá nadie tenga que salir
perjudicado, ni interinos ni opositores turno libre, ni academias, ni ciudadanía…..ese
es mi deseo para 2022, 2023, y 2024.
Feliz Año 2022 y a seguir
Creo Fini que el problema es ese "interés general" que mencionas. Llevo tiempo viendo que en política las decisiones se toman en función de intereses concretos, de los colectivos
ResponderEliminarque en cada momento se organizan para defender sus derechos. El interés general no es ya un parámetro a considerar. Nuestra política ya es una política de "lobbys", aunque a nadie guste reconocerlo.
Complicado de gestionar el tema de la temporalidad porque el problema no se ha resuelto. Ha sido una patada para adelante y en pocos años andaremos en las mismas. Suerte con la gestión de lo que ahora nos toca.
¡Cuánta razón tienes!
EliminarY mientras nuestros políticos y sindicatos miran hacia uno y otro lado, se va generando una crispación que a nadie beneficia nada más que a ellos.
Por mi parte, sea dentro onfuera de la Administración, seguiré aportando mi granito de arena 😊 Buen día